jueves, 27 de julio de 2017

De viaje con mis amigas

Este viaje surgió como surgen la mayoría de las cosas buenas de la vida, con una idea loca que tiras en una cena con amigas: viajar a la playa en vacaciones de invierno todas juntas. Viaje de chicas! Surgieron varios destinos pero el presupuesto era limitado asi que concluimos que el norte de Brasil sería ideal ya que hace calor todo el año, es dentro de todo cerca y bastante accesible.


Pasaban los meses y esa "idea en el aire" iba convirtiéndose en un deseo cada vez más fuerte, sólo faltaba darle forma!
Por supuesto que yo era una de las más entusiasmadas!! Así que me dispuse a encontrar un pasaje económico para que podamos ir todas.



El pasaje apareció milagrosamente un viernes a la tarde, cuando el cansancio de la rutina se siente más y la falsa libertad del fin de semana te invita a correr al aeropuerto. Ahí estaba el vuelo que necesitabamos, con una sola escala de no más de 2 horas y a mitad del precio regular. Era nuestra oportunidad! Barbi y yo no lo pensamos y lo compramos inmediatamente! Fer lo consultó con su almohada y su corazón y finalmente aceptó y a Viki le costó una noche más y un empujoncito de Juan.




Ahí estábamos, las 4 abriendo camino a la aventura! Luego conseguimos los departamentos donde nos íbamos a alojar en Natal y Pipa respectivamente y los traslados. 
Debo confesar que por más que haya organizado viajes sola varias veces, siempre tengo miedo de confundir alguna fecha o número de documento, por lo que los nervios me acompañaron hasta el día que nos subimos al avión.



Como siempre mis posts llevan el mensaje final de que el dinero no es una limitación para hacerlo, siempre visto desde mi visión de laburante clase media. Quiero que vos qué estás leyendo esto y tenés un sueldo todos los meses te animes a ver más y salir de tu zona de seguridad. Que vivas el viaje!
No podría volverme más feliz de cómo resultó el nuestro. Porque no fueron vacaciones, fue un viaje!









Viajar es abrir la mente a nuevas experiencias, como cuando Fer vencio el miedo al mar y se metió a hacer SUP sola. O como cuando Viki se subió a la lancha para ver los delfines en su hábitat natural y manejó un cuatri con barbi atrás. Viajar es vivir! Es Barbi cumpliendo su sueño de aprender a surfear, es Fer bancandose el que dirán y extrañar a las dos mitades de su alma. Es Viki tirandose primera del Kamikaze y también soy yo sientiendome viva una vez más y amando el vuelo y el suelo.









jueves, 6 de julio de 2017

Carta a mi yo de 20 años

Tenés apenas 20 años, y muchas cosas maravillosas están por llegar. Con 20 años te vas a animar a lanzarte a la primer aventura en el exterior. Vas a aprender muchas cosas sobre vos misma. Vas a ir con amigos y vas a volver con más amigos. Vas a reencontrarte con esos amigos de viajes en otros viajes. Los vas a adorar. Vas a aprender a hacer snowboard. Vas a besar en inglés.

Quiero decirte que viajes, que lo hagas tanto como sea posible. Que ese primer viaje te va a abrir muchas puertas. Vas a volver a viajar lejos, pero te va a costar despegarte. Vas a enamorarte de alguien que no te va a cortar las alas y te va a esperar cuando vuelvas.

Te vas a recibir aunque digas que no te importa. Te vas a dar cuenta que sí te importaba. Vas a tratar de estudiar otra cosa. No te va a gustar. Vas a ser “teacher”. Te va a encantar tu trabajo y lo vas a odiar. Después vas a aprender que es sólo eso, un trabajo. Te vas a estresar. No creo que aprendas a organizarte. Vas a llorar por no saber qué hacer de tu vida.

Te vas a hacer promesas que no te vas a cumplir. No hay un año que vayas a ir entero al gimnasio. Te vas a aburrir. Mucho y de todo. Vas a perder gente amada y vas a amar a gente nueva. Vas a llorar. Vas a tener un perro que va a ser parte de la familia.

Vas a vivir un año entero en otro país. Vas a viajar mucho. Te vas a querer volver, pero no lo vas a hacer. Vas a extrañar a tu mamá y a tu papá.

Vas a aprender a ignorar todo aquello que no aporta a tu causa. Vas a volver a llorar por no saber qué hacer de tu vida. Vas a aprender a coser a máquina. Vas a intentar tu propio negocio.

Vas a pensar que odias estar sola, hasta que vivas sola. Vas a amar tu soledad. Vas a desear estar aburrida.

Tal vez si pudiera darte algún consejo sería ¡Viajá más! Hacé todos los Work and Travel del mundo. No vuelvas a tu rutina tán rápido, la “normalidad” te confunde. Al principio crees que estás bien y luego te arrepentís de no haberte ido.Ojalá ese primer viaje de 20 hubiese sido ininterrumpido hasta los 30 o 40!.

Querida Yanina de 20 años, cuando cumplas los 30 vas a haber deseado hacer mucho más, pero vas a estar satisfecha de tener muchas historias que contar. ¡Y las vas a contar!

Habrá mil cosas que hubieras deseado que sean diferentes pero aún así tenés que tener la tranquilidad de que te hicieron quién sos hoy.